jueves, 30 de julio de 2009

El nanche y el durazno

Ahora escribo desde San Juan Juquila Mixes (ver punto 15 en el mapa). Ya hace varios pueblos que dejamos atrás las tierras bajas y solo ahora he podido pasar por el pensamiento las impresiones que me dejó esa parte del recorrido. La primera vez que visité un pueblo de la zona baja hace varios años, me sorprendió el hecho de que las mujeres vistieran de manera muy similar a las de Juchitán pero que hablaran ayuujk. Mi poco conocimiento sobre esa parte de la región provocó que me sorprendiera mucho que la vestimenta que yo asimilaba totalmente como parte de la cultura zapoteca del Istmo coexistiera con la lengua mixe. Y es que eso es algo que no solo me pasó a mí, creo que hacia el exterior la idea que se tiene sobre los pueblos mixes corresponde más frecuentemente a las características de la zona alta: montañas, frío, bandas de música de viento... Pero como siempre, si uno se acerca, todo es más complejo y aún dentro de la misma región, la diversidad es la constante. San Juan Guichicovi por ejemplo me recordó mucho a Ayutla; aunque parecieran polos opuestos (ubicación geográfica y clima contrastantes) tienen en común el hecho de que están en las fronteras hacia el exterior y vivir en el límite impone modos de vivir "el ser mixe" de una manera distinta en comparación con los pueblos que no son fronterizos. Las condiciones de este tipo de pueblos son complejas y siempre cambiantes. Pero creo también que en eso hay una riqueza, que la mezcla y las mutuas influencias culturales no significan necesariamente una falta hacia un ideal de pureza cultural que además nadie podría definir, la vida en estos pueblos fronterizos es también una manifestación de ser mixe, es también una manera de vivirlo, tan mixe es la marimba como la tuba, tan mixe el calor y el nanche como el frío y el durazno. Porque a estas alturas del mundo y de la historia quién puede definir lo que es ser puro. Y quién puede sostener que definir cosas como ésas tengan algún sentido.

4 comentarios:

  1. ELENA PAI
    Qué bueno saber donde andas!
    Juquila Mixes por fin.
    Cada pueblo un logro y nuevas felicidades.
    Ahora sí ya vas conociendo la región mixe como la palma de tu pie.

    Abrazos con efecto barritas!

    ResponderEliminar
  2. En Juquila, nada menos...
    creo que esas sorpresas son las recompensas del viaje.
    Abrazos

    ResponderEliminar
  3. Y es k a estas alturas de mundo ...k flojera ..k sentido tiene andar definiendo e identificando lo "PURO" como pa' qué... tengo tantas ganas de verte!!! y de verte cuando acabe esto!!!..besos

    ResponderEliminar
  4. Que risa. Otra vez leerte me humedece los ojos. Es extraño leer mis propias palabras escritas por tu mano. Tu y yo somos uno mismo uo u u o. Timbiriche es sabio. Nos vemos mañana

    ResponderEliminar